Stephany Abasali, nos sorprende transportándose a una época dorada con el glamour y la elegancia como protagonistas. En su más reciente sesión fotográfica, la intensidad del azul profundo se convierte en el marco ideal para resaltar su piel y su porte de diva, evocando la sofisticación de los icónicos años 50.
La propuesta, creada por el fotógrafo Francisco Andara, logra capturar esa dualidad entre misterio y poder, fusionando la suavidad clásica con la fuerza de una mujer moderna, rindiéndole un tributo a la feminidad celebrada como arte.
Stephany reafirma su lugar como ícono de elegancia venezolana, demostrando que la esencia de una reina está en su capacidad de reinventarse y deslumbrar, sin perder el toque clásico que define a una Miss Universe Venezuela.