Edad: 25
Profesión / Ocupación: Lic. Publicidad y Relaciones Públicas.
Hobbies: Leer, escribir, cocinar, y hacer yoga.
Instagram: @Alessandracombatti
Respetuosa, dinámica y responsable.
La escritura: tengo la capacidad de comunicar de manera correcta y efectiva usando la palabra escrita. También la planificación estratégica, mi habilidad para pensar y diseñar un plan de acción.
Mi interés es influir e inspirar a todas las personas para que salgan a cumplir sus sueños, porque no importa de donde venimos, lo que importa es encontrar un propósito en nuestras vida, descubrir qué es lo queremos lograr, y saber hacia donde queremos ir. En segundo lugar, a través del optimismo, porque debemos limpiar de nuestra vida todos nuestros miedos, quejas, culpas, e inseguridades, para así poder alcanzar todos nuestros objetivos y metas. Por último, pero no menos importante, es que nunca dejemos de aprender, porque siempre habrá un mundo por explorar, una experiencia por vivir, y un camino por andar.
Mi amabilidad, pienso que todas las personas son dignas de ser amadas y respetadas. Ser amable nos genera felicidad a nosotros mismos y a todas las personas; como dice el dicho “trata a los demás como quieres ser tratado” y así es como lo aplicaría a mi profesión, tratando a todos por igual, con el mismo amor y respeto.
Durante mi adolescencia, un grupo de amigas y yo fundamos un apostolado católico llamado Club Giro, de niñas y adolescentes que buscan la verdad, el sentido de la vida, y hacer el bien a los demás. A través de encuentros que se transforman en experiencias y estas experiencias en convicciones, convicciones que se graban en la mente y en el corazón como pilares de su personalidad.
Esta labor social me enriqueció espiritual y personalmente, al educar e influenciar todas estas niñas en proceso de crecimiento, además de a mí misma también. La participación social nos da sentido de pertenencia hacia nuestra cultura y comunidad, convirtiéndonos en seres más solidarios y compasivos. Por ende, considero que todas las personas deberíamos realizar labores sociales.
La mayor lección que aprendí en mi niñez ha sido no compararme con nadie porque todos las personas somos únicos, especiales, e irremplazables. Me enfoco en el aprender, y no en el competir, creo en el dicho que la práctica hace al maestro, y si no nacimos con talento, podemos trabajarlo para construirlo. Esta es una lección que me ha sido de gran utilidad y que aplico en todos los aspectos: en la familia, la escuela, el trabajo, y la vida en general.
Dormir hasta medio día jajaja.
Una de las cosas que más me he disfrutado durante este recorrido, es conocer cada día algo nuevo de mí misma, gracias a nuestros encuentros, actividades y formaciones diarias. Al mismo tiempo, descubriendo que la única competencia que tengo es conmigo misma, la cual debo superar, para así poder lograr el verdadero éxito.
También he disfrutado hablar en público y frente a las cámaras, porque ha sido una nueva experiencia y una verdadera revelación para mí, ya que he visto mi evolución a través de la práctica, la disciplina y la perseverancia. Descubriendo el poder de conectar con todas las personas que nos ven, motivando e inspirando a través de mis palabras. Mostrándole al mundo mis capacidades, principios, valores y convicciones.
Convertirme Miss Venezuela, ser una portavoz para miles de personas que quieran transmitir sus historias y generar un valor en ellas. Honrar a mis padres, llevando una vida por el buen camino y por la educación que me han brindado. Seguir formándome y superándome como persona, como una mujer valiente y empoderada.
También poder hacer un TED Talk, contribuir de manera sostenible en mi comunidad, apoyar a mi país dejando una huella de alegría y esperanza, ayudando a los más necesitados. Y a su debido tiempo, convertirme en esposa y madre.
Que soy una persona muy reservada, sin embargo, pienso que es mi momento para mostrarle al mundo la persona que soy, una mujer soñadora, valiente, educada, humilde, y trabajadora. Con ganas de generar un impacto social, crear proyectos novedosos, y recuperar el sentido de comunidad, a través de mi participación y compromiso.
¡Celebramos la belleza real!
